A lo largo de la historia, la relación que algunos poetas han mantenido con el vino ha sido apasionada e intensa, un ejemplo de ello es el siguiente poema del gran poeta Pablo Neruda, en él, Neruda considera al vino como un elemento “gregario”, “coral”, nosotros compartimos y reforzamos su idea, queremos sobre todo resaltar que el vino une, que propicia el grupo, la amistad, la alegría, se bebe porque se bebe en compañía, porque se comparten palabras, sentimientos y emociones. Disfrutemos con este poema tan hermoso.
Oda al vino
VINO color de día,
vino color de noche,
vino con pies de púrpura
o sangre de topacio,
vino,estrellado hijo
de la tierra,
vino, liso
como una espada de oro,
suave
como un desordenado terciopelo,
vino encaracolado
y suspendido,
amoroso,
marino,
nunca has cabido en una copa,
en un canto, en un hombre,
coral, gregario eres,
y cuando menos, mutuo.
A veceste nutres de recuerdos
mortales,
en tu olavamos de tumba en tumba,
picapedrero de sepulcro helado,
y lloramos
lágrimas transitorias,
pero
tu hermoso
traje de primaveras diferente,
el corazón sube a las ramas,
el viento mueve el día,
nada quedad
entro de tu alma inmóvil.
El vino
mueve la primavera,
crece como una planta la alegría,
caen muros,
peñascos,
se cierran los abismos,
nace el canto.
Oh tú, jarra de vino, en el desierto
con la sabrosa que amo,
dijo el viejo poeta.
Que el cántaro de vino
al beso del amor sume su beso.